High Life.
El película esperada de la semana. Ganadora del premio FIPRESCI en el pasado Festival de San Sebastián, no dejó a nadie indiferente. A positivar dijo de ella: “(…)seductora desde la metafísica. Un hombre en una nave espacial, con su bebé a bordo, son los únicos supervivientes de una misión que sirve de condena a jóvenes violentos de la sociedad. Su objetivo era acercarse a un agujero negro en busca de energía. La justificación de lo que pasó con el resto de la tripulación es el meollo del asunto. No es película esta hecha para fanáticos de la ciencia ficción; quizá es más un producto visual, con aires confusos, que busca la interpretación individual. Atrapante sí que resulta”. Entrecomillarse a uno mismo es la hostia.
La película de animación de la semana. Si algo triunfa hay que repetirlo. Vuelven las figuritas a intentar salvar el mundo. 93 minutos que harán las delicias de niños y no tan niños. Sí, es una frase hecha.
La película de época de la semana. Biopic sobre María Estuardo de Escocia: dramón biográfico de gran factura con dos actrices nominadas al Oscar —por otros trabajos—y dirigido por una prácticamente desconocida directora: Josie Rourke.
La película de terror de la semana. Una madre, angustiada ante el extraño comportamiento de su hijo, está convencida de que algo sobrenatural está transformando a su pequeñín y eso no le deja dormir tranquila. Suena a ya visto, oído y gritado.
La comedieta estadounidense de la semana. El viernes pasado se estrenó Familia al instante y esta semana toca Jefa por accidente. El que traduce los títulos debe de tener alguna aplicación para su cometido. ¿La sinopsis? A Jennifer López le van a pasar muchas cosas en su nueva empresa. Si la veis ya me las contáis. Eso sí, tenéis que positivar algo.
La comedia francesa de la semana. Un título que resuena sobre un adolescente que encuentra en el piano la evasión a su mala vida.
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