(LO IMPOSIBLE IS A SPANISH MOVIE) Por fin los anti cine español ya tienen una película que no parece española: con sus increíbles efectos especiales, con la que salía en King Kong, con el protagonista de Moulin Rouge, con una épica banda sonora repleta de violines que acentúan sentimientos, con nominaciones a los Oscar y, encima, basada en hechos reales como Titanic. Quizá es una herejía o un chiste fácil, pero es recomendable, como siempre lo es, que Lo imposible se vea en versión original: más que nada porque los actores están bastante bien. Aunque las voces que les doblan también molan: son las de Brad Pitt y la de Sandra Bullock. Yo creo que esta película sí le puede gustar a mi amiguete Luis a pesar de ser española; además casi no se nota.
No es cine de mi estilo, sobre todo en su segunda mitad. Pero es cine muy respetable y técnicamente portentoso. Y sencillamente prefiero que Lo imposible sea la película española más taquillera de la historia a que lo sea cualquiera de la saga Torrente. Es por esto que encontré totalmente fuera de lugar aquellas declaraciones de José Luis Cuerda en una entrevista para el ABC donde comentó: “No voy a hablar de Lo imposible porque no la he visto y… no me interesa esa historia. Es más, no quiero decirlo que agresividad, pero a mí me repugna”. Y no acabó todo ahí, pues siguió explayándose a gusto unas cuantas líneas más. Todos mis respetos al autor de la genial Amanece, que no es poco, pero desdeñar de tal manera la ilusión y el esfuerzo de quien realiza el cine que le interesa no es de recibo, y más si tantos millones de personas han disfrutado y apreciado la película.
Por si queda alguien, que me extraña, que no sepa cuál es la sinopsis, Lo imposible cuenta la historia de supervivencia que María, Henry y sus tres hijos vivieron en Tailandia en las navidades de 2004 debido a aquel devastador tsunami que causó casi un cuarto de millón de víctimas, entre muertos y desaparecidos, en el sudeste asiático. Es la historia real de una familia española que contó en la radio su traumática experiencia. Mientras se encontraban en la piscina del complejo hotelero, la gigantesca ola arrasó todo lo que encontró a su paso dejando la familia separada e iniciando una búsqueda que duró días. El programa radiofónico fue escuchado por Belén Atienza, productora del film, y, tras hablar con J.A. Bayona y ponerse en contacto con dicha familia, acabó convirtiéndose en Lo imposible.
El arranque es imponente. A los pocos minutos de iniciarse, y tras una sucinta presentación de personajes, llega el tsunami. Y lo que me quedó claro es que el señor Bayona es sobredotado y tiene un talento fuera de serie para plantear imágenes y para recrear intensas sensaciones mediante la narración audiovisual. Una primera parte formalmente perfecta deja a la familia dividida en dos y al producto que estamos viendo también. Aunque el resto de la película se ve bien y tiene cierto ritmo, el excedente de melodrama, esa música acentuando Lo imposible en todas las sílabas y unos diálogos enormemente aculebronados a mi entender, le restaron emoción; y así como con la secuencia del tsunami nos dejamos llevar, en esta parte es la película la que nos dirige por donde quiere y no deja que entremos en la historia. Solamente queda esperar al milagroso y poco sorpresivo final. Eso sí, a positivar la prodigiosa recreación del tsunami que, guste o no, deja claro que J.A. Bayona sabe, por lo menos técnicamente, muchísimo de cine.
2 Comments
A mi me gustó mucho. A la altura, si no por encima, de las mejores producciones made in USA del género. A mi también me alucina la reacción del maestro Cuerda, más que nada por que es el mentor de Amenábar, otro director español con aspiraciones internacionales.
Comentaré lo que he venido diciendo desde el principio. Yo la ví el día del estreno. Éramos pocas personas en la sala. Alabo el trabajo de BAYONA porque está hecho desde la honestidad. Nos guste o no, él quería hacer una película con todos esos ingredientes y lo ha logrado. Eso es para felicitarlo y no para criticarle. Chapeau!